jueves, mayo 12, 2005

Curas

tengo gripe
mi garganta es un infierno olvidado
el tabaco no quiere ser mi amigo en estos días
todo el mundo intenta curarme con recetas milagrosas
y me invitan a tragarme ajos y cebollas
hierbas y flores
miel y limón
pero nadie toca las razones verdaderas
la gripe crece cuando encuentra la tristeza
hace nidos con las hebras sueltas del corazón
teje paredes en el pecho
nadie deja que la gripe se meta en las palabras
la respiración
los pulmones
y la boca
con ganas de tener gripe
es la tristeza la que abre las puertas
de par en par
y le da la bienvenida al cuerpo
para estar acompañada mientras siembra su árbol
y su sombra
ni con ajos ni tequila se quita la tristeza
primero hay que erradicarla a carcajadas
y patearle el trasero justo cuando está en el borde de la piel
darse un baño profundo de sentido
y en silencio
enamorarse
de la forma redonda de la vida
para que entonces la gripe se muera de miel