viernes, agosto 25, 2006

Brújulas que no alcanzan













"Pez", Glipto29, 14 de julio de 2004.

Hay cosas que se saben desde antes:
Los finales sin olas,
El café desabrido,
Los restaurantes malos,
La cicatrización pobre de una herida,
Los oscuros nubarrones de tristeza.
Los sentidos avisan y aletean,
Claman por un golpe de timón y la amnistía.
Olemos, escuchamos, contemplamos:
Todo lo indica.

Pero algo pasa que no podemos retirarnos.
Estiramos la mano por una breve rendija soñadora
Con la esperanza temblorosa de que la profecía no fragüe.
Que algo le falte en la sangre y el corazón para no tener el cuerpo sólido.
Para ser únicamente una estela de vapor imaginaria.

Y entonces, acontece.
Como un reloj de arena imperturbable.
Grano a grano van cayendo los eslabones en la tierra.
Y ahí estamos
Otra vez
Sin calma:
Sosteniendo la cuerda para no quebrarnos,
Bebiéndonos aquel café impotable,
Mascando unas comidas horrorosas
Y sacando torniquetes y paraguas
Para protegernos de quién sabe qué
Catástrofe repentina.

4 Comments:

At 9/08/2006 4:37 p.m., Anonymous Anónimo said...

Antes
ya sabíamos
lo que íbamos
a olvidar.

Después
ya olvidamos
lo que íbamos
a saber.

Entre el tobogán
y la miseria
entre mirar para abajo
y ver que los escalones
están llenos
mejor sentir
el vértigo de la madera.

 
At 9/26/2006 9:17 p.m., Blogger Maria Caracol said...

Nadie
Ni uno mismo
Convence
A la piel
De vivir en una cápsula

Que bueno que viniste

 
At 10/05/2006 8:54 a.m., Anonymous Anónimo said...

de piel somos
casi transparentes
un retoño
pisoteado por los niños
amarrado por la lluvia
despedazado
por este sol de amor y luz
casi seguro
de haber sabido
me quedaba en la capsula lunar.

 
At 10/30/2006 9:54 p.m., Blogger Maria Caracol said...

Apuesto mil a uno a que ni inventándote historias sobre el coco y los fantasmas nocturnos, te hubieran convencido de quedarte encerrado en una membrana.

 

Publicar un comentario

<< Home